El séptimo Sello del Apocalipsis. ¿Lo peor está por venir....?

Cuando el Cordero abre el último sello, a Juan se sorprende grandemente a descubrir que de repente todo el cielo se ha callado en un profundo silencio. Todo el ruido terminó; nadie se mueve y no pasa nada por media hora. Ante Dios están los siete ángeles de la presencia, que conocemos como los arcángeles. En medio del silencio, sin explicación alguna, se le da una trompeta a cada arcángel. Las trompetas entregadas en medio del silencio del séptimo sello serán los instrumentos del próximo septenario de acción divina.
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